Comunicación
03/05/2020
Oler a Oveja
Benito, Fermín, Joaquín, Fernando, Pepe, Jesús, Teo…. Todos pastores del Pueblo de Dios. Nombres concretos. Personas entregadas al servicio del Reino. Cercanas a la gente. Cada uno con sus limitaciones y pecados. También con sus cualidades y virtudes.
Jesús en el Evangelio de hoy está haciendo referencia a los dirigentes que tenían que ser pastores y que realmente son rapaces que se apoderan del rebaño. Esa situación es la que viene a cambiar Jesús. Lleva a las ovejas, a los mejores pastos para que vivan. Yo he venido para que tengan Vida en abundancia. El ladrón (dirigentes), no solo roba, despoja a la gente del pueblo de lo que es suyo, sino que sacrifica a las ovejas, es decir, les quita la vida. La misión de Jesús es exactamente la contraria: les da Vida y las restituye en su verdadero ser.
¿No caen uds, en la cuenta de que caminamos, hacemos y hacemos, trabajamos con desvelos pero nos hemos dejado el alma atrás?. Tiene que venir esta pandemia para pararnos y dejar que ese alma nos alcance. Y para esto están los pastores, para animar el alma, para llevar vida, aliento y cercanía.
Hoy Domingo del Buen Pastor celebramos la Jornada Mundial por las vocaciones. El lema escogido para este día es elocuente. Jesús vive y me quiere vivo. ¿esto que quiere decir?
El anuncio del evangelio no es cuestión de convencer a nadie sino de invitar a descubrir esa llamada que transforma la vida. Es el Padre es el que tiene la iniciativa. Por eso Jesús dice que nadie viene a mi sino lo atrae el Padre(Jn 6,44).Lo contrario sería proselitismo.
El Papa Francisco en su mensaje para esta jornada alienta y agradece la labor de los sacerdotes y dice expresamente. ‘a pesar de nuestras fragilidades y carencias, la fe nos permite caminar al encuentro del Señor resucitado y también vencer las tempestades. Él nos tiende la mano cuando el cansancio o el miedo amenazan con hundirnos, y nos da el impulso necesario para vivir nuestra vocación con alegría y entusiasmo’
Por tanto esa imagen de ‘oler a oveja’ para escuchar, para abrir caminos, para sufrir con el que sufre y llevar a Dios. Animo.
Manuel San Miguel