El obispo celebra en San Cristóbal de Entreviñas la solemnidad de Pentecostés

En la Jornada de la Acción Católica y del Apostolado Seglar, Monseñor Valera ha celebrado la eucaristía en la parroquia de la localidad de San Cristóbal de Entreviñas, perteneciente al arciprestazgo de Benavente-Tierra de Campos, confirmando a ocho adolescentes de la parroquia.

En su homilía el obispo afirmó que el Espíritu Santo nos trae la novedad de Dios y nos invita a que en la vida diaria nos dejemos tocar por él para que nos guíe, nos renueve por dentro y nos de entrañas de profundidad personal. En un camino no siempre fácil, Monseñor Valera señaló que la fuerza del Espíritu transforma “nuestras zonas de sombra, nuestros comportamientos que no son según Dios”, y nos purifica por fuera y también por dentro.  

La clave, indicó Fernando Valera es “permanecer estables en la fe, con una firme esperanza en el Señor. Aquí está el secreto de nuestro camino. No habrá dificultades, tribulaciones, incomprensiones que nos hagan temer si permanecemos unidos a Dios como los sarmientos están unidos a la vid, si no perdemos la amistad con Él, si le abrimos cada vez más nuestra vida”. Insistió el obispo en que “con Él podemos hacer cosas grandes y sentiremos el gozo de ser sus discípulos, sus testigos”.

A los jóvenes que recibieron el sacramento de la confirmación, Monseñor Valera les recordó que el Espíritu hará presente en sus vidas el amor del Señor y estará siempre dispuesto a recibirles cuando estén cansados y agobiados.

El obispo concluyó su homilía recordando, con palabras de la carta a los Gálatas, que el Espíritu enseñará el lenguaje nuevo del amor, la alegría, la paz, la comprensión, la servicialidad, la bondad, la lealtad, la amabilidad y el dominio personal.