El obispo convoca la II Asamblea Diocesana

Fernando Valera, obispo de Zamora, propone una nueva asamblea diocesana para seguir desarrollando el camino de conversión pastoral que se iniciara expresamente el curso pasado.

Pretende Monseñor Valera seguir a la escucha de aquello a lo que el Espíritu nos llama como pueblo de Dios que camina en esta tierra de Zamora. Por ello, vuelve a convocar a una jornada especial en la que, juntos y en escucha de la Palabra, podamos determinar las realidades concretas que marcarán el itinerario pastoral de la diócesis de Zamora para el curso que viene y en continuidad con el ya terminado. Esta II Asamblea Diocesana será el 23 de septiembre en el Seminario-Casa de la Iglesia. Cabe destacar que en esta ocasión no sólo participarán los órganos consultivos del Obispo, sino también algunos representantes de las diferentes realidades pastorales presentes en cada arciprestazgo de la Diócesis. 

Desde el Colegio de Arciprestes, teniendo en cuenta la diversa realidad de cada arciprestazgo, para el próximo curso pastoral se propone un año especial, en el que la conversión misionera de nuestra realidad sea la prioridad pastoral. Así, se habla de poner en marcha unas “misiones populares” en las que se intente revitalizar la vida de fe de nuestras comunidades (poniendo el acento especialmente en el mundo rural) para que salgan de sí mismas y emprendan un camino misionero hacia “los alejados” (primer anuncio).

A su vez, ese proceso incluye, mientras se camina, una revisión de las estructuras diocesanas, arciprestales y parroquiales, de modo que entre todos se pueda construir una Iglesia diocesana más sinodal. Y, juntamente a todo lo anterior, se ve como necesario prestar una atención especial a los diferentes ministerios de las comunidades (celebrantes de la Palabra, catequistas, acólitos y lectores, diáconos permanentes, voluntarios de Cáritas, etc.) a través de dos realidades fundamentales: el acompañamiento y la formación integral (que incluye una dimensión espiritual).

Esta propuesta es lo suficientemente amplia y genérica como para que se pueda perfilar entre todos, de modo que en la segunda Asamblea Diocesana (en la que participará, de forma representativa, toda la diócesis) se concreten los medios y las acciones de cara al curso pastoral 2023-24.