Vega de Villalobos da los primeros pasos para rehabilitar su torre espadaña

La localidad zamorana de Vega de Villalobos ha comenzado a dar de forma oficial los primeros pasos para, a través de la creación de una Comisión vecinal y de la mano de la Fundación ZamorArte, rehabilitar su torre espadaña en la única iglesia que existe en la actualidad en el municipio, la de San Román.

Para ello, los vecinos tendrán que contribuir a sufragar parte de los trabajos con campañas de donaciones y actividades organizadas para, en un camino que se prevé a medio plazo, reunir los fondos necesarios. Una nueva experiencia de micromecenazgo, similar a la que se puso en marcha en Villalpando para salvar San Pedro.

Así se ha acordado en una reunión informativa celebrada recientemente en el templo y en la que participaron diferentes colectivos de la localidad: la Asociación Cultural las Pandas, las cantoras del coro, el Club del Jubilado, el Club de Caza, miembros de las Peñas; así como las distintas Cofradías asociadas a la parroquia: las Candelas, el Cristo y San Isidro, junto con el Ayuntamiento, encabezado por la alcaldesa, Rebeca Navias.

´Salvemos nuestra Torre´

El director de la Fundación ZamorArte y responsable del área de Cultura, Patrimonio y Sociedad de la diócesis de Zamora, Juan Carlos López, fue el encargado de explicar las vías a seguir para lograr el propósito de rehabilitar la torre del municipio, que es la imagen más simbólica de esta localidad de Tierra de Campos, de 89 habitantes censados en 2023.

El párroco, Abelardo Febrero, hizo hincapié en que, pese a que este ha sido el primer encuentro abierto a toda la población para tratar esta cuestión, se lleva trabajando en el proyecto desde hace tres años. Si bien el templo es de 1830, la torre espadaña es anterior, aunque no está datada su fecha de construcción y presenta un deterioro destacado.

La reunión comenzó con la exposición de un video de 15 minutos que anima al vecindario y personas vinculadas con Vega a ser parte de este proyecto de trabajo colectivo para recuperar la torre. Un final con el toque de las campanas restauradas hace unos años, un trabajo para el que los vegueses también aportaron colaboración, anuncia el lema final: Salvemos Nuestra Torre.

Con numerosas imágenes de la espadaña, la proyección recoge los testimonios de la vecina de mayor experiencia de vida de Vega, Domitila, de 93 años, y la última niña en nacer en el municipio, Sara, de 17, que explican qué significa para ellas la torre, sus campanas y la necesidad de rehabilitación.

También los de Esperanza y Andrea, octogenarias que añoran esa estampa desde su Erandio y su Zaragoza de acogida. Con una sucesión de imágenes antiguas y más modernas, --en 1962 cuando Abelardo Febrero llegó como párroco por primera vez a Vega había 800 habitantes--, el video lanza la pregunta de si los vegueses apuestan por luchar para salvar su imagen más icónica, que “llama a casa”, y a cuyos pies se han celebrado los mejores y los más felices, pero también los más tristes momentos del municipio. Es decir, cada etapa de la vida.

DOS LOCALIDADES

Juan Carlos López instó a los vegueses a seguir el “ejemplo” de la vecina Villalpando y su campaña Salvemos San Pedro, impulsada también por ZamorArte. “Es un camino replicable”, señaló a los asistentes, al tiempo que reconoció haber visto que, para los vegueses, “no es simplemente una torre: es un símbolo, un emblema”.

Una memoria valorativa realizada en 2020 apuntaba a unos 50.000 euros el importe estimado para los trabajos –un estudio que deberá ser actualizado y revisado—con el objetivo de devolver a la torre “la prestancia que tuvo” y que se pueda “legar a futuro”. López avanzó la posibilidad de concurrir al convenio de bienes inmuebles que el Obispado mantiene con la Diputación de Zamora para poder financiar el 50 por ciento de la intervención, para lo que es necesario “convencer” a la Comisión de Obras de la Diócesis, que valorará la posibilidad de incorporar la rehabilitación para 2026 ya que 2025 está cubierto.

El director de ZamorArte hizo notar que en Zamora hay más de 350 parroquias y todas presentan alguna necesidad. “Los recursos son los que son”, afirmó López. El restante 50% correría a cargo de la propia parroquia y, para ello, se requiere la constitución de un grupo motor o Comisión, que quedó finalmente conformado al término de la reunión y con el que se deberá empezar a trabajar en un Plan de Acción por fases, que incluya una informativa para dar a conocer el proyecto –“que la provincia sepa que existe un pueblo llamado Vega de Villalobos”, indicó--; la cuestación popular –con certificación de donación para bonificaciones fiscales—y también una campaña de crowfunding a través de plataformas creadas al efecto para lanzarlo al exterior.

“Esto no es de hoy para mañana, pero es ir empezando a caminar”, se destacó en la reunión, en la que López recalcó que todo ese proceso debe ser “meridianamente transparente y público”.